Apenas el 5% de las personas con síndrome de Down en edad de trabajar lo hace. Todavía, son muchos los prejuicios que operan en contra de la inclusión laboral de este colectivo que, sin embargo, está cada vez más preparado. Basta pensar en nombres como el malacitano Pablo Pineda, el primer europeo con este trastorno, en terminar una carrera universitaria, Magisterio, y a punto que concluir otra, Psicopedagogía.
¿Por qué contratar a personas con síndrome de Down?
Con independencia del tamaño de la empresa, la incorporación de trabajadores con síndrome de Down en las misma puede reportarnos múltiples beneficios. Estos son solo algunos de ellos, pero si te quedase alguna duda, te la solucionamos. Basta con que pinches aquí
- Mejora la imagen de la empresa, otorgándola el prestigio de cuantas entidades se comprometen con la inclusión laboral de colectivos desfavorecidos, creando con ello una imagen de empresa solidaria y responsable, toda vez que las personas con síndrome de Down cuentan con enorme apoyo y empatía social.
- Aumenta la productividad de la plantilla. Frente al estereotipo de que las personas con discapacidad están a menudo de baja o que no pueden rendir al mismo nivel que sus compañeros, está comprobado que sucede al contrario: están tan motivados, tan comprometidos por demostrar su valía, que encaran sus tareas con una alta implicación y habilidad. A su vez, esta actitud estimula al resto de la plantilla.
- Facilita la concesión de contratos en el sector público, al requerir estos un mínimo de personas con discapacidad incorporados en plantilla.
- Fomenta la diversidad, lo cual permite enriquecer los puntos de vista, las maneras en las que se pueden resolver problemas o conflictos, los modos de trabajar. Así como no leemos el mismo libro cada día, sino que vamos adentrándonos en lecturas heterogéneas y eso favorece que nuestro modo de entender el mundo tenga muchos más matices y sutilezas, que la plantilla de nuestra emplea sea plural garantiza una mejor cultura de lo diverso en un mundo que cada vez lo es más.
- Permite beneficiarse de subvenciones y bonificaciones: las empresas que contratan personas con síndrome de Down pueden recibir subvenciones de hasta 3.907 euros por contrato indefinido, bonificaciones de la Seguridad Social de hasta 6.300 euros al año si el trabajador es mayor de 45 años (5.100 euros para los menores de esa edad), subvenciones por la adaptación de puestos de trabajo de has hasta 901 euros e importantes deducciones en la cuota del Impuesto de Sociedades por cada persona que se contrate para incrementar la plantilla.
Seguro que estos cinco puntos (aunque hay otras razones igual de poderosas para contratar a personas con síndrome de Down) te han convencido. Ahora solo tienes que contactar con nosotros si necesitas ayuda para incluir en tu plantilla trabajadores con síndrome de Down. Basta con escribirnos aquí